El tráfico estará regulado por semáforos provisionales durante los fines de semana y cada día entre las 19:00 y las 08:00 horas del día siguiente. Durante las obras serán dos operarios señaleros los que dirigirán las entradas y salidas del pueblo.

El Cabildo de Gran Canaria reabrirá al tráfico la carretera GC-60 de acceso al casco histórico de Tunte a partir de las 12:00 horas de este próximo viernes. Así se lo confirmaron este martes a una veintena de vecinos el consejero insular de Obras Públicas, Carlos Sánchez, y el concejal de Servicios Municipales y Ordenación del Territorio, Fernando González Montoro.

La reapertura de la carretera se llevará a cabo en cumplimiento del compromiso que adquirieron con los vecinos a finales del pasado mes de mayo el propio consejero insular de Obras Públicas y el alcalde Marco Aurelio Pérez.

Para posibilitar la reapertura de esta carretera el Cabildo instalará tres semáforos convencionales con carácter provisional y temporal, a la entrada del pueblo y en las vías 60 y 65, que regularán el tráfico sólo durante los fines de semana y también diariamente entre las siete de la tarde y las ocho de la mañana.

Además, la carretera también permanecerá abierta de lunes a viernes durante el horario de trabajo de la empresa Ecoroc, que lleva a cabo la fijación del talud de ocho de la mañana a siete de la tarde, aunque controlada por dos de sus operarios señaleros, que serán los encargados de dirigir la entrada y salida de los vehículos.

El concejal Fernando González solicitó a los vecinos la mayor colaboración posible para que se respeten los semáforos y se impidan actos vandálicos contra los mismos. “La apertura de la carretera con esos semáforos es un esfuerzo y un riesgo que asume el consejero y el Cabildo, y todos debemos aportar nuestro granito de arena para respetarlos, porque se trata de garantizar la seguridad de todos las personas que pasan por debajo del risco”, dijo.

Filtración del cemento

Carlos Sánchez admitió que las obras de perforación del risco para la instalación de la malla protectora continúan dentro de los plazos previstos para su finalización antes del próximo 8 de agosto, aunque éstas se están desarrollando con algo de retraso debido a una mayor filtración del cemento que se le está inyectando al risco en los agujeros de los bulones.

El consejero de Obras Públicas afirma que ese imprevisto no retrasará la obra aunque sí es probable que pueda encarecerla. “En cualquier caso haremos todos los esfuerzos posibles para intentar finalizar esta obra que consideramos prioritaria antes del plazo previsto. El risco está ahora más seguro que antes. Ya se ha instalado el 50% de la malla y esta semana va a ser crucial para la instalación de entre 4 y 5 puntos de anclaje al día que era el ritmo que se tenía inicialmente previsto”, indicó.

El ingeniero del Cabildo Alejandro Santana, director de las obras, confirma que ya se han instalado 1.500 metros de malla spider, y que este martes quedaría fijado al risco el quinto bulón de 18 metros de profundidad de los 190 que está previsto instalarse.

También confirmó que la obra está teniendo dificultades de ralentización con el terreno a la hora de aplicar la lechada de cemento, porque todo el macizo está suelto a una determinada profundidad y eso ha provocado que ya se haya consumido 33 toneladas de lechada de hormigón para sellar los huecos.

El consejero Carlos Sánchez también aseguró ante los asistentes a esta cuarta reunión que, una vez abierta la carretera y finalizadas las obras, el Cabildo y el Ayuntamiento buscarán fórmulas para reactivar la economía y el comercio de la zona, “para poder compensar el esfuerzo y sacrificio que han hecho los vecinos durante este tiempo”.